Secret
Nombre. Secret
Couple. Kaisoo (Kai/JongInxD.O/Kyungsoo-EXO)
Tipo. OneShot
Rating. R {+18} (Contiene Smut/Lemon/Relación sexual explicita)
Prologo. JongIn no es bueno con el alcohol, le dijeron.
N/A. Aunque no lo crean(?) es mi primer Lemon/Smut xD~ Saranghae~
1655 Palabras
Kyungsoo POV
-Hyung... ¿Cómo se sentirá hacerlo con un hombre?
Mis ojos se agrandaron de la sorpresa ante la pregunta del menor. Era un sábado por la noche, habíamos acabado todas nuestras actividades y nos encontrábamos en la sala tomando unas cervezas, ya que, para nuestra suerte, el dia siguiente lo teníamos libre.
-Ya sabes, ellos.. -Decía el menor apuntando hacia el cuarto compartido de Baekhyun y Chanyeol dando un pequeño suspiro. Hace no mucho ambos chicos nos revelaron su relación después que todos los miembros los encontramos en pleno acto en esta misma sala, por lo que no pudieron negarlo.
-Podrías ir... y preguntarles. - Dije en broma, por lo que el menor me miró pensativo para luego levantarse. ¿No estará pensando en ir, cierto?. Por suerte él sólo se quedó de esa manera, con su mirada pensativa perdida en algún rincón de la sala.
-Ah... - Dijo en suspiro, para luego sentarse y seguir tomando de su lata, la cual ya era su tercera. -Hyung... -
-Mh? -
-Tu... me quieres, ¿cierto? -
-Claro que sí. Sabes que eres mi Dongsaeng favorito - Le respondí con una sonrisa. Siempre lo había querido, desde el momento que entré a la empresa y lo conocí me pareció una persona muy buena y amable.
-Hyung. - Su voz sonaba muy firme y grave, añadiendo que sus ojos se veían muy oscuros y firmes, como si estuviera teniendo una lucha interna consigo mismo. Pero luego estos cambiaron para transmitir un sentimiento de tristeza y decepción. -Ah, Hyung... -
Y así él comenzaba a tomar su cuarta lata y con ella la quinta y sexta. Hasta que ya no quedaron más. Yo sólo lo miraba, había recordado una vez que Suho dijo que no le dejáramos tomar.. pero se veía tan triste que no tuve el valor de detenerlo. No pasaron muchos minutos cuando el pequeño cayó dormido sobre la mesa. Se veía más angelical que nunca, con su cara apoyada en su brazo y sus ojos relajadamente cerrados, realmente era una imagen hermosa desde cualquier perspectiva.
Ya eran las 5 de la mañana y estaba seguro de que si alguien nos encontraba de esta manera estaríamos castigados hasta casarnos, por lo que me levante rapidamente y me dispuse a botar las latas vacías para luego tomar al menor lentamente evitando que se despertara, llevándolo suavemente hacia nuestra habitación compartida y recostándolo en su cama.
- Hyung... -Sentí como me tomaba del brazo impidiendo que me retirara..
- ¿Qué pasa?- Pregunte sin más, quizás estaba comenzando a sentirse mal por todas las bebidas que había tomado.
- Hyung... -
No note realmente cómo ni cuando paso, sólo sabía que estaba sintiendo algo húmedo sobre mis labios, eran los suyos que con los ojos cerrados lentamente pedía cercanía. Tomó mi cintura con ambos brazos acercándome lo más que pudo a él. Poco a poco sentí como sus labios pedían algo más, siguiendo mi instinto, le correspondí abriendo un poco mi boca para darle permiso a su lengua para que examinara toda mi cavidad bucal. Cerré mis ojos al sentir su respiración en mi oído y luego un mordisco en mi lóbulo, haciendo que mordiera mi labio para evitar que algún sonido extraño saliera de mi boca. Sus manos recorrían mi torso por sobre la ropa deseando tocar más. De un momento a otro nos encontrábamos recostados en la cama, él sobre mi y yo sin camiseta. Los besos ya no eran suaves, ahora eran fogosos, bruscos y desesperados, me había vuelto loco, todos los sentimientos que llevaba por años escondidos estaban floreciendo. No me importaba si esto pasaba a causa del alcohol, iba aprovechar el momento, quizás no habrían mas como este en el futuro.
Desesperadamente comenze a tocar su cuerpo bajo la camiseta, aquel torso que deseaba hace tanto tiempo. Aquel cuerpo solo había podido mirar desde lejos o a través de un mísero espejo, ahora se encontraba sobre mí pidiendo que lo tocara. Le quite la camiseta para girarnos, así quedando arriba de él. Comencé a besar su clavícula, dejando pequeñas marcas de besos y mordiscos. Su olor me embriagaba cada vez más. Esto era lo que llevaba necesitando por años. De a poco fui bajando hasta llegar a su pantalón, pasando mis manos por encima de la tela haciendo que el menor diera pequeños gemidos de excitación.
- Hyung.. por favor.. - Escuchaba decir, a lo que asenti. Desabroché el pantalón haciendo que desapareciera, al igual que su boxer, dejando salir a su miembro ya completamente erecto. Poco seguro lo tomé dándole una pequeña lamida en la punta, haciendo que el menor emitiera un pequeño gemido ante la sensación. - Hyung... -Sabía lo que me pedia, asi que meti su caliente miembro a mi boca, bañándolo en saliva mientras mi lengua jugaba en el espacio libre. Cuando sentí que no cabía más carne dentro de ella, comencé a mover mi cabeza succionando su miembro. Poco a poco iba aumentando la velocidad hasta que sentí algo espeso comenzando a escurrirse, él había terminado.
- Hyung... esto no puede quedar así - Dijo el pequeño tomando mi mentón para subirme hasta su cara y poder besar aquellos labios que a pesar de los pocos segundos que había dejado, ya extrañaba. De alguna forma, el menor cambio su posición, dejandome a mi abajo, así comenzando a desnudarme. Recostado con la cabeza hacia atrás, sentía como pasaba sus manos por mi abdomen, bajando hacia donde deberían estar los ya desaparecidos pantalones y ropa interior. Él no lo haria, estaba seguro.
En un momento, volvió a besarme para luego separarse a buscar algo dentro del cajón de la cómoda, sacando una pequeña botella con un liquido transparente dentro de ella, era lubricante.. Alto.. algo no me estaba calzando, ¿Cómo es que un borracho podría levantarse y recordar exactamente dónde se encontraba aquel líquido?.. Pero antes de que pudiera formular mas preguntas, senti como su dedo ya lubricado se encontraba dentro de mi cavidad, haciendo movimientos circulares, No pasó mucho tiempo cuando ya eran tres dedos que se movían de la misma manera, dándome reacciones que nunca antes había sentido. Después de no mucho rato, sentí como sacaba sus dedos para dar paso a su miembro. Podía notar al menor algo nervioso, con anterioridad me comentó que esta su primera vez, por lo que de alguna manera me acerque para besarlo y decirle que todo estaría bien, entregándole valor y confianza. Y de esa manera, yo igual estaba reprimiendo parte del dolor que sentía por la penetración del comienzo. A pesar de que aquel acto me diera un sentimiento desgarrador, era algo excitante poder sentir como el miembro del menor palpitaba de la misma excitación. El pequeño me miró pidiendo permiso para lo que sería el clímax de la noche. Yo solo asentí cerrando los ojos, para luego comenzar a dar pequeños suspiros junto a gemidos cuando el movimiento del va y ven dentro de mi iba aumentando.
No sabía exactamente cuánto tiempo había pasado, pero se sentía realmente bien, a pesar de que cada vez las embestidas del menor era más fuertes y bruscas, era algo que quizas no volveria a experimentar nunca. Ante tal excitación y el choque entre el vientre del moreno junto a mi miembro. Terminé corriéndome entre ambos y como efecto secundario, el menor termino haciéndolo dentro de mí, cayendo con la respiración bien agitada sobre mi pecho.
- Hyung... - Dijo el moreno entre suspiros, pero yo, con miedo de escuchar algo no agradable, callé sus palabras con un beso, nuestro último beso. Luego de esto, ambos cansados, caímos en los brazos de morfeo.
-¿Kyungsoo? - Escuché como la voz de Suho me llamaba, y podía asegurar que no sonaba muy bien.
-¿Que pasa, Hyung? - Eran las 7:30 de la mañana, y como era obvio, no dormí nada. Me dirigí rápidamente hacia la cocina donde se encontraba él apoyado sobre el mesón con los ojos puestos en el basurero.. Mierda! Olvide esconder bien las latas.
-Y JongIn? - Me pregunto levantando la ceja. El mayor era quien más preocupaba por el pequeño, era como un padre cuidando a su único hijo.
-Mmm... Está.. durmiendo. Sí, durmiendo, Hyung - Dije desviando mi mirada mientras sonreía. Él sólo suspiró cerrando sus ojos.
-Bebieron, cierto? - Me miró seriamente. Ah, realmente no podía engañar al líder, él siempre se enteraba de todo por lo que terminé asintiendo en silencio. Él sólo suspiró nuevamente y puso su mano en su cien cerrando los ojos.
-Ah. Hyung, no te preocupes. Sabes lo que siempre pasa con JongIn cuando toma - Dijo una voz uniéndose a las nuestras. Por el tono grave supe que era Chanyeol, quien se acababa de levantar. - El nunca recuerda que pasa luego que toma su cuarta copa - Terminó de decir esto sonriendo mientras salía de la habitación.. ¡¿QUÉ?! ¿Él.. él.. olvida todo? Me quedé mirando la puerta sin poder procesar lo último mencionado. Luego cambié mi mirada hacía Suho el cual solo asentía, dejándome solo en la cocina. ¿Como es que era de esa manera? ¿Y si él olvida todo lo que paso?.. Pasaron unos minutos en los cuales terminé decidiendo dejar de pensar en ello. A pesar de que algo en mi se sentia incómodo y deprimido, comencé a cocinar, era lo único que podía alegrarme el día.
-¿Qué haces? - Me sorprendí al sentir unos brazos alrededor de mi cintura y su voz en mi oído, pero... ¿qué estaba pasando aqui?
-¿Como es que tú..? - Pregunte pero él sólo me guiñó el ojo dándome un suave pero íntimo beso en los labios.
-Shhh... Este será nuestro pequeño secreto - dijo mostrándome esa sonrisa que tanto me encantaba, no sabía muy bien cómo sería mi futuro o más bien, el nuestro. Pero algo sí sabía, el presente no lo cambiaría jamás.
Una acción vale más que mil palabras...
Mis ojos se agrandaron de la sorpresa ante la pregunta del menor. Era un sábado por la noche, habíamos acabado todas nuestras actividades y nos encontrábamos en la sala tomando unas cervezas, ya que, para nuestra suerte, el dia siguiente lo teníamos libre.
-Ya sabes, ellos.. -Decía el menor apuntando hacia el cuarto compartido de Baekhyun y Chanyeol dando un pequeño suspiro. Hace no mucho ambos chicos nos revelaron su relación después que todos los miembros los encontramos en pleno acto en esta misma sala, por lo que no pudieron negarlo.
-Podrías ir... y preguntarles. - Dije en broma, por lo que el menor me miró pensativo para luego levantarse. ¿No estará pensando en ir, cierto?. Por suerte él sólo se quedó de esa manera, con su mirada pensativa perdida en algún rincón de la sala.
-Ah... - Dijo en suspiro, para luego sentarse y seguir tomando de su lata, la cual ya era su tercera. -Hyung... -
-Mh? -
-Tu... me quieres, ¿cierto? -
-Claro que sí. Sabes que eres mi Dongsaeng favorito - Le respondí con una sonrisa. Siempre lo había querido, desde el momento que entré a la empresa y lo conocí me pareció una persona muy buena y amable.
-Hyung. - Su voz sonaba muy firme y grave, añadiendo que sus ojos se veían muy oscuros y firmes, como si estuviera teniendo una lucha interna consigo mismo. Pero luego estos cambiaron para transmitir un sentimiento de tristeza y decepción. -Ah, Hyung... -
Y así él comenzaba a tomar su cuarta lata y con ella la quinta y sexta. Hasta que ya no quedaron más. Yo sólo lo miraba, había recordado una vez que Suho dijo que no le dejáramos tomar.. pero se veía tan triste que no tuve el valor de detenerlo. No pasaron muchos minutos cuando el pequeño cayó dormido sobre la mesa. Se veía más angelical que nunca, con su cara apoyada en su brazo y sus ojos relajadamente cerrados, realmente era una imagen hermosa desde cualquier perspectiva.
Ya eran las 5 de la mañana y estaba seguro de que si alguien nos encontraba de esta manera estaríamos castigados hasta casarnos, por lo que me levante rapidamente y me dispuse a botar las latas vacías para luego tomar al menor lentamente evitando que se despertara, llevándolo suavemente hacia nuestra habitación compartida y recostándolo en su cama.
- Hyung... -Sentí como me tomaba del brazo impidiendo que me retirara..
- ¿Qué pasa?- Pregunte sin más, quizás estaba comenzando a sentirse mal por todas las bebidas que había tomado.
- Hyung... -
No note realmente cómo ni cuando paso, sólo sabía que estaba sintiendo algo húmedo sobre mis labios, eran los suyos que con los ojos cerrados lentamente pedía cercanía. Tomó mi cintura con ambos brazos acercándome lo más que pudo a él. Poco a poco sentí como sus labios pedían algo más, siguiendo mi instinto, le correspondí abriendo un poco mi boca para darle permiso a su lengua para que examinara toda mi cavidad bucal. Cerré mis ojos al sentir su respiración en mi oído y luego un mordisco en mi lóbulo, haciendo que mordiera mi labio para evitar que algún sonido extraño saliera de mi boca. Sus manos recorrían mi torso por sobre la ropa deseando tocar más. De un momento a otro nos encontrábamos recostados en la cama, él sobre mi y yo sin camiseta. Los besos ya no eran suaves, ahora eran fogosos, bruscos y desesperados, me había vuelto loco, todos los sentimientos que llevaba por años escondidos estaban floreciendo. No me importaba si esto pasaba a causa del alcohol, iba aprovechar el momento, quizás no habrían mas como este en el futuro.
Desesperadamente comenze a tocar su cuerpo bajo la camiseta, aquel torso que deseaba hace tanto tiempo. Aquel cuerpo solo había podido mirar desde lejos o a través de un mísero espejo, ahora se encontraba sobre mí pidiendo que lo tocara. Le quite la camiseta para girarnos, así quedando arriba de él. Comencé a besar su clavícula, dejando pequeñas marcas de besos y mordiscos. Su olor me embriagaba cada vez más. Esto era lo que llevaba necesitando por años. De a poco fui bajando hasta llegar a su pantalón, pasando mis manos por encima de la tela haciendo que el menor diera pequeños gemidos de excitación.
- Hyung.. por favor.. - Escuchaba decir, a lo que asenti. Desabroché el pantalón haciendo que desapareciera, al igual que su boxer, dejando salir a su miembro ya completamente erecto. Poco seguro lo tomé dándole una pequeña lamida en la punta, haciendo que el menor emitiera un pequeño gemido ante la sensación. - Hyung... -Sabía lo que me pedia, asi que meti su caliente miembro a mi boca, bañándolo en saliva mientras mi lengua jugaba en el espacio libre. Cuando sentí que no cabía más carne dentro de ella, comencé a mover mi cabeza succionando su miembro. Poco a poco iba aumentando la velocidad hasta que sentí algo espeso comenzando a escurrirse, él había terminado.
- Hyung... esto no puede quedar así - Dijo el pequeño tomando mi mentón para subirme hasta su cara y poder besar aquellos labios que a pesar de los pocos segundos que había dejado, ya extrañaba. De alguna forma, el menor cambio su posición, dejandome a mi abajo, así comenzando a desnudarme. Recostado con la cabeza hacia atrás, sentía como pasaba sus manos por mi abdomen, bajando hacia donde deberían estar los ya desaparecidos pantalones y ropa interior. Él no lo haria, estaba seguro.
En un momento, volvió a besarme para luego separarse a buscar algo dentro del cajón de la cómoda, sacando una pequeña botella con un liquido transparente dentro de ella, era lubricante.. Alto.. algo no me estaba calzando, ¿Cómo es que un borracho podría levantarse y recordar exactamente dónde se encontraba aquel líquido?.. Pero antes de que pudiera formular mas preguntas, senti como su dedo ya lubricado se encontraba dentro de mi cavidad, haciendo movimientos circulares, No pasó mucho tiempo cuando ya eran tres dedos que se movían de la misma manera, dándome reacciones que nunca antes había sentido. Después de no mucho rato, sentí como sacaba sus dedos para dar paso a su miembro. Podía notar al menor algo nervioso, con anterioridad me comentó que esta su primera vez, por lo que de alguna manera me acerque para besarlo y decirle que todo estaría bien, entregándole valor y confianza. Y de esa manera, yo igual estaba reprimiendo parte del dolor que sentía por la penetración del comienzo. A pesar de que aquel acto me diera un sentimiento desgarrador, era algo excitante poder sentir como el miembro del menor palpitaba de la misma excitación. El pequeño me miró pidiendo permiso para lo que sería el clímax de la noche. Yo solo asentí cerrando los ojos, para luego comenzar a dar pequeños suspiros junto a gemidos cuando el movimiento del va y ven dentro de mi iba aumentando.
No sabía exactamente cuánto tiempo había pasado, pero se sentía realmente bien, a pesar de que cada vez las embestidas del menor era más fuertes y bruscas, era algo que quizas no volveria a experimentar nunca. Ante tal excitación y el choque entre el vientre del moreno junto a mi miembro. Terminé corriéndome entre ambos y como efecto secundario, el menor termino haciéndolo dentro de mí, cayendo con la respiración bien agitada sobre mi pecho.
- Hyung... - Dijo el moreno entre suspiros, pero yo, con miedo de escuchar algo no agradable, callé sus palabras con un beso, nuestro último beso. Luego de esto, ambos cansados, caímos en los brazos de morfeo.
-¿Kyungsoo? - Escuché como la voz de Suho me llamaba, y podía asegurar que no sonaba muy bien.
-¿Que pasa, Hyung? - Eran las 7:30 de la mañana, y como era obvio, no dormí nada. Me dirigí rápidamente hacia la cocina donde se encontraba él apoyado sobre el mesón con los ojos puestos en el basurero.. Mierda! Olvide esconder bien las latas.
-Y JongIn? - Me pregunto levantando la ceja. El mayor era quien más preocupaba por el pequeño, era como un padre cuidando a su único hijo.
-Mmm... Está.. durmiendo. Sí, durmiendo, Hyung - Dije desviando mi mirada mientras sonreía. Él sólo suspiró cerrando sus ojos.
-Bebieron, cierto? - Me miró seriamente. Ah, realmente no podía engañar al líder, él siempre se enteraba de todo por lo que terminé asintiendo en silencio. Él sólo suspiró nuevamente y puso su mano en su cien cerrando los ojos.
-Ah. Hyung, no te preocupes. Sabes lo que siempre pasa con JongIn cuando toma - Dijo una voz uniéndose a las nuestras. Por el tono grave supe que era Chanyeol, quien se acababa de levantar. - El nunca recuerda que pasa luego que toma su cuarta copa - Terminó de decir esto sonriendo mientras salía de la habitación.. ¡¿QUÉ?! ¿Él.. él.. olvida todo? Me quedé mirando la puerta sin poder procesar lo último mencionado. Luego cambié mi mirada hacía Suho el cual solo asentía, dejándome solo en la cocina. ¿Como es que era de esa manera? ¿Y si él olvida todo lo que paso?.. Pasaron unos minutos en los cuales terminé decidiendo dejar de pensar en ello. A pesar de que algo en mi se sentia incómodo y deprimido, comencé a cocinar, era lo único que podía alegrarme el día.
-¿Qué haces? - Me sorprendí al sentir unos brazos alrededor de mi cintura y su voz en mi oído, pero... ¿qué estaba pasando aqui?
-¿Como es que tú..? - Pregunte pero él sólo me guiñó el ojo dándome un suave pero íntimo beso en los labios.
-Shhh... Este será nuestro pequeño secreto - dijo mostrándome esa sonrisa que tanto me encantaba, no sabía muy bien cómo sería mi futuro o más bien, el nuestro. Pero algo sí sabía, el presente no lo cambiaría jamás.
Una acción vale más que mil palabras...
